Las vacaciones son alegres y
brillantes...
Hasta que tu hermana decide casarse con tu ex en Navidad.
Ahora me dirijo a casa en Sugar Mountain para esta pesadilla de boda.
Para empeorar las cosas, mi némesis del trabajo de alguna manera me convenció
para llevarlo como mi cita.
Es gruñón y grosero, el hombre más exasperante del planeta. Sinceramente, olvídate
de decorar los pasillos, preferiría darle un puñetazo en la cara.
No ayuda que sea increíblemente guapo. Pero me odia, o eso creía yo.
Hasta que una cita falsa lo cambia todo.
Ni siquiera mi familia puede evitar caer rendida a sus encantos.
Está desdibujando las líneas, confundiendo las cosas.
Haciéndome querer hacer tintinear sus campanas.
No sé qué va a pasar después de este viaje.
De lo único que estoy segura es de que fingir ser amable nunca se ha sentido
tan travieso.
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