Sólo amigos.
Somos sólo amigos.
No, en serio. Ella es mi mejor amiga...
Arizona Turner ha sido mi mejor amiga desde cuarto grado, incluso cuando nos “odiábamos”. Hemos estado allí el uno para el otro a través de los primeros besos, primeras “veces”, y hemos estado constantes del otro cuando buenas relaciones se tornaron malas. (Incluso fuimos a universidades que estaban a minutos de nosotros…)
A lo largo de los años, y a pesar de lo que digan, nunca hemos cruzado
la línea.
Nunca pensé en ello.
Nunca quise.
Hasta que una noche todo cambió.
Por lo menos, así debió ser...
Sólo amigos.
Somos sólo amigos.
Sólo estoy diciendo esto hasta averiguar si sigue siendo “sólo” mi mejor amiga...
Sólo amigos...
Somos sólo amigos...
No, espera. Ya no somos sólo mejores amigos.
Mantén a tus amigos cerca y a tus enemigos aún más...
Odio a Rachel Dawson desde que tenía siete años. Mi vecina de al lado y
enemiga jurada número uno, ella es la razón por la que casi todas las peleas de
nuestra infancia terminaron cuando yo le prendía fuego a algo suyo. (O,
viceversa.)
Me delató cuando llegué tarde.
La delaté cuando mintió sobre tener un novio.
Fuimos de un lado a otro de esta manera a lo largo de la escuela
secundaria, ambos jurando no volver a hablarnos nunca más cuando nos fuimos a
la universidad.
Pero eso fue hasta que ella apareció en mi apartamento durante mi último año y me pidió un lugar temporal para quedarse. Hasta que me di cuenta de cuánto habíamos cambiado, y la línea que creía que nunca cruzaríamos se hizo cada vez más difícil de ignorar....
Epílogo extendido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario